lunes, 29 de agosto de 2011

BUENAS NOCHES SOLEDAD


Me estoy acostumbrando
a la pobreza de mis labios
al guiño constante
de la soledad
y al pestañeo
que enmudecen mis lágrimas
mientras se insertan mis latidos
en tu recuerdo.
Te estoy echando tanto de menos,
esta mañana quiero hacerte
un rocío de propuestas,
quiero crear constelaciones
con tus sonrisas
y derrumbar este ataúd de silencios
mientras mi lengua calla en tu boca.
Te estoy echando tanto de menos,
que en la dársena de mi pecho
se consumen mis deseos
sin temor a que por tu vientre,
se deslicen las clemencias
de mi boca.
Te estoy echando tanto de menos,
que este peregrino de silencios y olvidos
escribe un prefacio
en alguna página perdida de su vida,
buscando gestos
en el cajón de las preguntas.

José Manuel Acosta.

INCONCLUSO

Por el precipicio de tus labios,
insoluble el beso
que muere entre tus párpados
y el espejismo de tu sombra.
A jirones, mis versos rotos
acunan el alba entre almohadas vacías
y hasta los pájaros
gimen tu ausencia.
Te clavas en los bordes de mi alma
en una serpentina de latidos
mientras grita mi esqueleto
el lenguaje del amor.
Sostengo la silaba prohibida,
aunque no callen mis ojos al mirarte
porque tú transitas
por mi corazón
cómo un inconcluso verso.

José Manuel Acosta.

sábado, 27 de agosto de 2011

CUANDO TE LLAMO Y TÚ NO ESTÁS

Acomódate en la noche inquieta
de mis latidos,
en la piedra rugosa del tiempo
y deja que soporte este silencio
contorsionándome
en una hemorragia de recuerdos.
Voy a embalsamar tu sonrisa
mientras una taxidermia de indiferencias
se clavan en la cruz de las intenciones
y los dedos de la virtud,
convierten en alabastro las lunas de la soledad.
Todos los días esculpo tu nombre
cuando me olvido
de ordenar los pensamientos,
en una sonata fugaz
de lágrimas
perdiéndose
por los pliegues de mis mejillas.
Acomódate en este mar
de sentimientos
porque el rumor de las olas
se está llevando los quejidos,
y el faro del olvido
está alumbrando la distancia
que se ahoga en pretensiones.
Acomódate
mientras finjo que vivo
junto al epitafio de mi tumba.

José Manuel Acosta.

viernes, 26 de agosto de 2011

RECUERDOS

La luz de la mañana
se atraganta en los pasillos de mi alma,
mis latidos se inquietan
cuando a mi mente
llega tu nombre
en deseos de abrazarte.
Qué no daría
por llegar a darle
un beso al destino,
y sacar de mi pecho
un latido
con el que devolverte la vida.
Qué no daría
por encontrar tu voz
en las noches calladas
que se van a hurtadillas
junto con mis lágrimas,
mientras los deseos
tuercen la esquina
despojándome de los sueños.
Qué no daría
por sentarme en la soledad de tus manos
y recorrer contigo
las huellas del silencio.
Qué no daría yo…..

José Manuel Acosta.

PIENSO EN TI Y....

Muere mi pluma
cayendo sus versos
por el desfiladero del alma,
cuarteándose los verbos
en el desosiego de la palabra
que enmudece
sin encontrar su sitio
mientras se hace extenso el olvido.
Examino mi conciencia
cuando parpadean las lágrimas
que dibujan latidos del color
de la luna,
y sigo amándote
en las notas musicales de mi pecho
en los latidos que llevan tu nombre,
porque no puedo
guardar estos besos
que denuncian mi soledad.

José Manuel Acosta.

lunes, 22 de agosto de 2011

TE LLAMO

Mi boca te llama ,
cuando tus besos calman el silencio
y mis manos reciben
las oraciones de tus caricias.
Te llamo cuando en mi garganta
se enquista tu lengua
macerando mi nombre
en tu respiración,
en el perfil mutilado
de tus ojos,
cuando te pintas
rabillos de auroras
jadeando rocíos sedientos .
Te llamo cuando muerden tus labios
suspiros
siendo mis palabras
un desasosiego de verbos
que enmudecen
en el olvido de tus brazos.
Te llamo cuando parpadean
mis lágrimas
en la extensión del alma
de mi pluma,
porque ella muere
cada vez que te llamo.

José Manuel Acosta.

QUEJIDOS


Se me escapan quejidos
en un rezo constante
sin imponer la palabra
que se rompe agónica
en cada oración.
Mi consuelo se cultiva
en soledad,
en la caricia de mis hijas,
de su madre
y cuando abro la ventana,
no veo a ningún Dios
esperándome .
Sigo atrapado en la nada
hasta que el destino
me conceda
descansar en paz.

José Manuel Acosta.

domingo, 7 de agosto de 2011

DESDE EL OLVIDO


Sin ti, vivir la transformación de la noches
cuando mis versos
acarician el rostro del verbo en su alma herida,
en la adversidad de mis latidos,
es buscar tus ojos
sin asimilar que mis lágrimas
quedan en el desierto de las caricias,
cuando tu boca llama
el vuelo de mis manos.
Enciendo gestos con
cuando me quiebro
en la agónica palabra
resucitada,
porque necesito necesitar
el sorbo de tus parpados
en mis necesidades.
Hoy , sujeto este verso
respirando tus recuerdos
en cada paso que doy al destino,
cuando la virtud
de los errores
se hace agónico olvido.


José Manuel Acosta.

viernes, 5 de agosto de 2011

REVOLUCIÓN DEL ALMA


Si despeinas el pulso del dialogo,
meces sin sentido la imaginación
mientras esta decide en apariencia
depurar su verdadero aspecto
en nombre de la virtud,
adoptando la más absurda literaria cómica
haces boca en conciertos de hipérboles,
simbiosis del alma
ajena a la escucha del hambriento
del sediento.
Sacias tu risa haciéndote inquilina
de otras lágrimas donde sembrar tu tristeza
y sin lunas llenas,
haces sordas las nieblas de los senderos de aguas.
Es por esa razón que mi alma,
prefiere estar desnuda de primaveras
que vestida de inviernos
para que el lecho,
bramido rojo de vida
no idealice el hielo
pudiendo ser un concierto de auroras
en las rocas.
Cuando viene el cielo
anunciando un paraíso inexistente,
un Carlo Magno sin conquistas
se despierta mudo en el valle de las utopías.
No abarques la miseria de tu soledad
en el esplendor de las manos,
esas que ponen la tierra
para nuestro camino.

José Manuel Acosta.

DERECHOS DE AUTOR


Llevo como instrumento
la soga de los que se alzaron a mi cuello,
tu gallarda espada asesina
que hundiste en mi pecho
yace tranquila
por tus lúgubres gemidos de cobardía
llevando por sombra tus respuestas
sin reflejos de preguntas.
Junto a mí, se construyen muros
traspasando el aroma de los no te olvidan,
y mi orbe será en su justa medida,
eterno descanso para este autor de derechos;
derechos a mis errores,
a mis fracasos,
a que hablen mis manos,
a vestirme de gabardina para que resbalen tus ojos
porque tus sonrisas fueron atrapadas en puños.
Hoy no quiero ser autor, ¡no!
autor de oídos sordos,
de injusticias,
de poemas excepcionales
de lecturas recomendadas.
Hoy sólo quiero ser autor de mi sinceridad y honestidad
y aunque vertido en errores e imprecisiones,
mi sensible alma
yacerá en la tumba
de quien pronuncia mi nombre en homenaje póstumo
para seguir existiendo, hazlo, pero escribe;
en homenaje a quien nunca juzgó,
tengo derechos de autor.

José Manuel Acosta.

UN VERSO ENTRE TUS DEDOS



Obedezco a lo definitivo
de tu boca ,
a la premura callada
de tus sueños
a tus palabras
vestidas de sotana
con la misma sensación
que busca un guiño
su complicidad ,
no debes preocuparte
del tiempo bronceado
de silencios
ni de la última queja
forastera ,
no muerdas la palabra que
tuerce la esquina
ni te alejes de la eficacia
de mis caricias .
Mis viejas cejas
quieren ostentar
el círculo de tus versos
cómo adolescente ,
y si algún día siento
el murmullo de un ciprés ,
tú sabes bien
que seguiré estando
entre tus dedos.

José Manuel Acosta.

EL DESEO MÁS BUSCADO


En el abisal de las almas ,
uno aprende a ver más allá de los colmillo del lobo
si comprendemos la sustancia de sus ojos ,
y me atrevería a preguntar
como discípulo mayéutico,
si la difusión de sus formas encierran alguna esperanza de abrazo .
Mientras en los grandes lagos de hormigón
paseamos en espirales semióticas ,
intenta el ladrón entrar por el bosque
encarnándose en docilidad lobezna
porque grita como las hojas resecas del otoño
y resbala como el musgo de las rocas .
En esa estética que compone fiera y naturaleza ,
sigo siendo un embrión lleno de ilusiones .
A veces todo lo más que llego a ser
es una parte de mi mismo , la otra sigue colándose
por el hueco mudo de mi garganta
tomando conciencia la felicidad
que sólo existe el presente .

José Manuel Acosta.

lunes, 1 de agosto de 2011

ANTES DE EQUIVOCARME ( 3er premio poetas universales )


No me importa acuñar cisnes
en prisiones primaverales
porque el amor,
no se baña en muros de indiferencias.
Me gustaría aglutinar sauces en tus ojos
y ponerles el color de tu corazón,
cerrar las tertulias de mi boca
cuando respiro tus besos,
y caramelizar el cielo
cuando las dudas,
evoquen penitencias
por el vacío hostil
de tu nombre.
No te das cuenta
que el amor
son peldaños de cantos gregorianos
y que mi sangre , corre más
que el gesto de una cerilla.
Amor, es la unión
de la primavera
en un plagio de flores constantes,
la unión
entre el corazón y el alma
capaz de recorrer toda distancia.
José Manuel Acosta.